Si alguien nunca ha tenido miramientos a la hora de compartir todo lo que se hace en su cuerpo, esa es Chiquis Rivera. Por eso ahora ha contado a sus seguidores cómo le quedaron los labios tras tatuárselos e irse de parranda. Lo cierto es que Chiquis no se portó nada bien. Según contó en sus redes sociales, este fin de semana se hizo un lip blushing, una técnica de tatuaje de labios para acentuar el color y dar una apariencia natural, pero luego del procedimiento la cantante tomó alcohol y los labios se le hincharon. Ahora en sus historias de Instagram, la hija de Jenni Rivera ha aparecido con los labios demasiado grandes, algo que le ha causado risa, pero espera que poco a poco recuperen su tamaño normal. En una ocasión Chiquis se sometió a una cirugía para levantar sus senos y mostró a sus seguidores sin ningún complejo las cicatrices que le había dejado.
La cantante, quien en estos momentos se encuentra en una increíble etapa profesional tras lanzar su nuevo disco y haber publicado su segundo libro, habló recientemente con People en Español sobre la importancia del amor propio. “He aprendido a través de los años a amarme, verme al espejo y ver las cosas que me gustan. Es mejor decir: ‘me gustan mis ojos, me gusta mi cabello’, y ser un poquito más agradecida con las cosas que sí tengo y no solo enfocarme en lo que no tengo. Eso me ha ayudado mucho, uno cuando se dice cosas bonitas se siente diferente. Me han ayudado las afirmaciones en las mañanas, decir soy bella, soy merecedora, soy capaz”.